Biotecnología • I+D+i • Sep 2023
La SAT Olé! estrena unos acolchados biodegradables de dos capas que retienen la humedad y reducen las pérdidas de agua por evaporación • Esta aplicación innovadora es fruto de unos 5 años de investigaciones y del compromiso de la compañía por la sostenibilidad
La Sociedad Agraria Transformadora (SAT) Olé! — principal exportador de alcachofa de España— ha puesto en marcha un método innovador y sostenible que ahorra hasta un 25% de agua de riego en sus cultivos de alcachofa.
Se trata de un sistema de acolchados biodegradables que consta de dos capas: una exterior blanca opaca, con el objetivo de transmitir el menor calor posible hacia el suelo, minimizando las altas temperaturas de los meses de verano y, por otra parte, una cara interna de color negro que impide que entre la luz solar y que se produzca la fotosíntesis con el fin de que no germinen las malas hierbas.
El director técnico de Olé!, Bartolomé Ramírez, ha señalado que gracias a esta técnica de cultivo “se mantiene la humedad en el suelo, se reducen las pérdidas por evaporación puesto que no hay una incidencia directa del sol y, además, permite controlar la mayoría de malas hierbas sin la necesidad de utilizar herbicidas”.
Ramírez afirma que este método, desarrollado por la firma ubicada en la pedanía de San Bartolomé (Orihuela), “es fruto de unos cinco años de investigaciones y de ensayos en campo con el objetivo de maximizar la eficiencia en el uso del agua y apostar por prácticas sostenibles”.
“Llevamos muchos años desarrollando esta técnica, hemos probado diversos materiales, colores, dimensiones… analizando cómo se comporta en el campo hasta que se ha comprobado su eficacia y el resultado es un material totalmente biodegradable certificado, ya que era un requisito indispensable para nosotros”.
El director técnico de Olé! ha precisado que este sistema lo estrenan este año de forma generalizada y lo han aplicado en cerca de 120 hectáreas del cultivo que se traduce en una producción que girará en torno a 2.500.000 de kilos de alcachofas.
Los acolchados biodegradables se colocan en el suelo justo antes de poner las plántulas de alcachofa, entre julio y agosto, que es cuando la planta está más expuesta y hay más incidencia por las elevadas temperaturas. Luego la planta se va desarrollando, ella misma va cubriendo el suelo con sus hojas basales, dificultando el crecimiento de malas hierbas, a la vez que el material se va degradando.
Además del método para ahorrar agua, Olé! lleva alrededor de 7 años aplicando otra técnica innovadora como es la biosolarización, un método sostenible de desinfección de suelo que combina la energía solar con los gases de la biodescomposición orgánica para prevenir la aparición de patógenos del suelo que producen enfermedades en el cultivo de la alcachofa y mejorar la producción de la planta.
Lo que hacemos, precisa el director técnico de Olé!, “es aplicar esta técnica dentro de nuestra rotación de cultivos, realizándola en los suelos más fatigados y que pueden presentar mayores problemas de patógenos. Procuramos hacerla después de un cultivo de brássicas, (brócoli, coliflor, etc.), porque dentro los estudios que se han realizado se ha demostrado que la descomposición de las brássicas libera unos gases (isotiocianatos) que ayudan a la desinfección de los suelos”.
En el caso de la biosolarización, lo ideal es ponerla entre seis y ocho semanas antes de que se vaya a plantar la alcachofa para que se acumulen las temperaturas necesarias que combaten los patógenos y que los gases de la biodescomposición de la enmienda orgánica se generen correctamente.
Este año, como novedad, la empresa de la pedanía oriolana de San Bartolomé ha colocado en las zonas de la biosolarización una serie de sensores a distintas profundidades que les transmite datos a tiempo real sobre los niveles de humedad, temperatura y conductividad.
Actualmente, estos datos nos dicen que tenemos una mínima de treinta y cinco grados y una máxima de cuarenta y cuatro grados a quince centímetros de profundidad del suelo. De esta forma, sabemos que con esa temperatura necesitamos un miligramo de carbono por cada gramo de suelo con el fin de que la descomposición de la materia orgánica se produzca correctamente y se produzcan esos procesos que nos ayudan a combatir los patógenos y a incrementar la fertilidad del suelo. • 9/23
Producción frutícola en Murcia
Limón, melocotón, nectarinas, albaricoque, ciruela, uva de mesa, pera o almendra son algunos de los productos que destacan de la amplia variedad frutícola de la Región de Murcia • La constante modernización de las variedades cultivadas permite ofrecer un producto adaptado a los gustos del consumidor • La calidad obtenida y las características de las zonas y técnicas de cultivo particulares han permitido establecer denominaciones de origen protegidas e iniciar el trámite de indicaciones de origen protegidas para varios tipos de frutas • La producción frutícola murciana genera, a la vez, puestos de trabajo y atractivos parajes con un gran potencial turístico
La calidad, disponibilidad de volumen, organización de la producción, especialidades y cultura gastronómica han convertido a Murcia en región de referencia europea en numerosos productos alimenticios. La interacción entre producción, medio y población conduce a particulares formas de vida, de paisaje y de especialidades culinarias en zonas determinadas de la geografía de la región.
Esto da lugar a una riqueza productiva y a una riqueza paisajística, asociada al cultivo de frutas de hueso (melocotones, albaricoques, ciruelas), de pepita (pera en particular), cítricos (limón), uva (de vino y de mesa) y frutos secos (almendros).
Existen múltiples variedades, base de la diversidad de la oferta, producidas en grandes cantidades, de acuerdo a la demanda de la distribución moderna.
El sector de la fruta murciana tanto de cítricos como la de hueso o pepita se caracteriza por sus extraordinarios esfuerzos a fin de compaginar las exigencias del mercado con las características de sus productos.
Varias de estas producciones sitúan a Murcia en una posición de liderazgo. En cuanto a limón, es la principal región productora en España. Sus más de 500.000 t constituyen más del 50 % de la producción española). Lo mismo ocurre con el melocotón y sus 295.000 t; una cuarta parte (23%) del total obtenido en todo el territorio español de esta especie se concentra en Murcia.
las 45.000 t de ciruelas y las casi 150.000 t de uvas de mesa sitúan a Murcia como la segunda región productora de estas frutas en España (26 % y 37 % respectivamente). Entre otras frutas que se cultivan en la región se encuentran los frutos secos, en especial la almendra, de la cual la región produce unas 38.000 t anuales sobre 74.000 ha, el 11 % de la superficie española dedicada a ese cultivo. La región de Murcia es la tercera región española en volumen de este producto.
El limón es la fruta de referencia para Murcia tanto por el volumen productivo de este cítrico como por el hecho de ser Murcia la sede de Ailimpo, la interprofesional que reúne a los representantes de la cadena de limón y del pomelo. Esta organización aglutina los esfuerzos de la actividad productiva y comercial de dichos productos. Una de sus contribuciones fundamentales es el incremento de la transparencia del mercado, un hecho de particular interés para los potenciales compradores nacionales e internacionales.
En Murcia se cultivan 25.000 ha de limonero, un árbol mediterráneo que se concentra en un área relativamente compacta entre la Huerta de Murcia y comarcas aledañas (Valle del Ricote, Vega Media, Campo de Cartagena). El 70 % de las exportaciones españolas proceden de Murcia, y la mitad de ellas se originan en el municipio de Santomera, en plena Huerta de Murcia.
Las dos variedades principales de limón cultivadas en Murcia son “Fino” y “Verna”. Ambas son variedades españolas. El limón fino tiene un alto rendimiento en zumo de elevada acidez y se recoge en invierno. La variedad Verna comienza su temporada en primavera y se prolonga hasta principios de septiembre lo que le permite estar presente en los mercados europeos cuando otras variedades ya han dejado de venderse.
El melocotón (durazno) es la fruta de hueso “típica” de la región de Murcia, cuya producción se localiza principalmente en el término municipal de Cieza.
Se distinguen básicamente dos grupos de variedades: los de carne dura o tipo “Pavía” y los de carne roja. Los primeros que representan aproximadamente el 60 % de la cosecha se destinan preferentemente a mercado interior e industria y las variedades de carne roja se destinan principalmente a mercado exterior.
Existe una amplia gama de variedades, extendiéndose el período de cosecha desde comienzos de mayo hasta finales de septiembre.
En Murcia se encuentran 3.400 ha dedicadas al cultivo de ciruela, básicamente en la comarca de la Vega Alta del río Segura. Al igual que otras frutas de hueso, la superficie ocupada por este cultivo leñoso está siendo renovada paulatinamente, introduciéndose nuevas variedades de mayor productividad y adaptación al mercado.
La diversidad varietal permite ampliar los calendarios de recolección de esta fruta, desde mediados de junio hasta avanzado septiembre.
El albaricoque (damasco) representa el 90% de la producción nacional, con sus 10.500 ha dedicadas a este cultivo y con una producción en torno a 100.000 t.
Destaca la variedad Búlida con destino a fresco y transformados, así como otras variedades más tempranas con destino a fresco, Valencianos, Mauricios, etc. El calendario de producción se extiende desde finales de abril a finales de junio.
La uva de mesa es un producto de buen volumen y alta especialización de la región de Murcia, cuya “puesta al día” es objeto de preocupación por parte de productores y autoridades de Murcia. La uva de mesa, tratándose de una fruta sabrosa y delicada, es muy sensible a las tendencias del mercado.
Tal vez la característica más influyente en este sentido es la ausencia de semilla en el fruto (uva apirena), lo que lleva a que a una considerable fracción de la producción murciana se le haya ido incorporando esta característica en los últimos años.
A la fecha más de la tercera parte de la producción regional de uva de mesa es de producto sin semilla. El ITUM, Investigación y Tecnología en Uva de Mesa, es un consorcio de investigación en el que participan 18 grupos empresariales murcianos dedicado a la investigación en nuevas variedades apirenas.
Otras características destacables para a la uva de mesa son un buen diámetro de fruto, buen sabor y resistencia al transporte. Todas estas características están siendo tenidas en cuenta en programas de reconversión del viñedo que están siendo desarrollados actualmente en la región, utilizando para ello las técnicas de investigación agronómica más avanzadas disponibles a fin de obtener variedades nuevas.
La DOP, Denominación de Origen Protegida, “Uvas de Espuña”, en trámite, busca el reconocimiento de las particularidades del fruto procedente de la variedad Dominga de Vitis vinifera, en las categorías Extra y Primera, acondicionada en fresco y cultivada y envasada en los términos municipales de Aledo, Alhama de Murcia y Totana. Se trata de una mutación genética espontánea ocurrida en la zona lo que, unido al microclima especial de la zona y a las prácticas de cultivo, da lugar a un producto de calidad diferenciada.
La producción de frutas de Murcia se continúa con un largo etcétera, en el que destacan melón y sandía, pera, etc. En lo que se refiere a pera, hay que destacar la Denominación de Origen Protegida “Pera de Jumilla”, en el municipio que le da nombre. Se trata de una zona con una antigua tradición de cultivo de esta fruta en la que actualmente están en producción unas 900 ha de perales.
La pera que se produce bajo la denominación de origen pertenece a la variedad Ercolini. Su pulpa es blanca, jugosa y muy azucarada. Su coloración externa se caracteriza por un color verde amarillento y chapa rojiza en las caras expuestas al Sol.
La alta insolación característica de la zona es uno de los factores principales que determinan sus superiores características organolépticas. La recolección es manual y se realiza en dos etapas, a fin de asegurar una máxima proporción de frutos que alcanzan los diámetros Extra y Clase I exigidos por la denominación.
La IGP “Melón de Torrepacheco”, en trámite, pretende reconocer las características del producto obtenido en la Comarca del Campo de Cartagena. Los tipos acogidos en el proyecto son los melones Piel de Sapo y Amarillo de la variedad Saccharinus Naud, y Galia y Cantaloup de la variedad Cantalupensis Naud. Mayor dulzor, jugosidad y sabor, así como un mayor peso y calibre, son los factores diferenciales frente a productos obtenidos en otras zonas.
Almendro y olivo son otros productos propios de la huerta murciana; los usos de la primera van desde frutos secos para consumo sin transformación como su empleo para la industria de la repostería y de la preparación de turrones y otras especialidades gastronómicas que hacen referencia a la herencia árabe en la zona. El olivo, un común denominador a toda la geografía española, está presente también en Murcia y es el origen de aceites de alta calidad.
Los anteriores son algunos ejemplos de la también generosa producción de fruta que se origina en la región de Murcia. Paralelamente, también se desarrollan cultivos especiales, obtenidos con gran esmero que los hace atractivos para el “gourmet”, para el repostero y para el turista gastronómico.
A ello se suman técnicas de producción cuidadosas con el medio ambiente y la trazabilidad del producto y el cumplimiento de regulaciones de producción integrada o de agricultura ecológica, así como de normativas de calidad de aceptación internacional (Eurep Gap, BRC, etc.), lo que hace que la producción murciana ofrezca garantías de seguridad, calidad, diversidad y disfrute.
La variedad de la oferta agrícola murciana puede conocerse cno detalle en el stand de la Consejería de Agricultura y Agua - Región de Murcia en Fruit Logistica, Berlín: pabellón 01.1, pasillo A, del 8 al 10 de febrero de 2007. •
Fuente: Consejería de Agricultura y Agua (Región de Murcia) • Enero 2007
Experiencias de control agrícola en Murcia
Alternativas fitosanitarias de bajo o nulo impacto sobre el medio ambiente y sobre el consumidor • El programa se implementa mediante una serie de Planes de Actuación Técnica desarrollados en diversos cultivos, a los que preceden una fase de estudio y experimentación que dura entre uno y tres años • Los resultados obtenidos son claramente esperanzadores
Los sistemas de producción agrícolas actualmente se sustentan en base a dos ejes fundamentales: la protección del medio ambiente y la seguridad alimentaria de las cosechas obtenidas, siendo estos mismos parámetros los que sirven para diferenciar unos sistemas productivos de otros.
La Consejería de Agricultura y Agua de la Región de Murcia ha creado un programa denominado AGRICULTURA LIMPIA, el cual busca alternativas fitosanitarias de bajo o nulo impacto sobre el medio ambiente y sobre el consumidor para las principales plagas de los cultivos más significativos de la agricultura murciana.
Este novedoso programa se basa en el empleo de métodos de lucha biológica y biotecnológica, con una reducción sistemática y progresiva de fertilizantes y productos fitosanitarios.
Larva predadora sobre áfido
Así en estos últimos cuatro años se ha intensificado la suelta de insectos beneficiosos que han colonizado los cultivos, todo ello apoyado con el empleo de técnicas biotecnológicas como es el trampeo masivo, la confusión sexual o la quimioesterilización que reducen de forma progresiva las poblaciones de los principales patógenos de la región.
De otro lado también se ha potenciado dentro de este programa la experimentación e investigación aplicada y se realizan controles intensivos en campo y almacén al objeto de velar por la imprescindible seguridad alimentaria y comprobar los niveles de residuos de las mismas.
Este ambicioso programa se implementa mediante una serie de Planes de Actuación Técnica desarrollados en cultivos tales como el tomate, pimiento de invernadero y para pimentón, cítricos, frutales y viñedo, los cuales son precedidos siempre de una fase de estudio y experimentación que dura entre uno y tres años.
Este plan de actuación se inicio en el año 1998 con actuaciones en cultivos de cucurbitáceas, para posteriormente en el año 2001 extrapolar la experiencia obtenida al cultivo del tomate, con el objetivo inicial de reducir la presión del virus de la Cuchara del Tomate (TYLCV) mediante el control biológico de su vector Bemisia tabaci mediante sueltas del parasito Eretmocerus mundi.
La superficie de actuación ha ido creciendo, al igual que los fondos invertidos desde la Consejería de Agricultura y Agua, pasando de las 500 hectáreas (300 de tomate y 200 de cucurbitáceas) del año 2003 a las 2.900 del año 2006 (2.300 de tomate y 600 de cucurbitáceas).
En la zona costera de los términos municipales de Lorca, Mazarrón y Águilas se soltaron en 2003 15 millones de auxiliares frente a 120 millones en 2006. También en este ultimo año se ha realizado experiencias en 92 ha de tomate mediante el control biológico integral sin el empleo de producto fitosanitario alguno.
Este plan de actuación es uno de los que cuenta con una mayor experiencia en la región. Este plan se inicia en el año 1997 en la Comarca del Campo de Cartagena y se ha extendido hasta alcanzar las 1.600 ha, lo que supone aproximadamente el 90% de la superficie de cultivo.
La aparición de nuevos problemas fitosanitarios en este cultivo como Ostrinia nubilalis o Nezara viridula, así como la implantación de nuevos sistemas de producción basados en la introducción de calefacción en los invernaderos, ha motivado la realización de nuevas experiencias de control basadas en las técnicas de confusión sexual mediante la aplicación aérea de feromonas y técnicas de mass-traping, así también como la introducción de Trichogamma. brassicae y Trichogamma evanescens (500.000 individuos) para el control de diversas orugas de lepidópteros. las actuaciones se han extendido también a otros cultivos al aire libre como brócoli, alcachofa, melón y sandía principalmente, en una superficie de unas 200 ha.
Este cultivo se ha encontrado en continua regresión debido a los importantes problemas fitosanitarios fundamentalmente la fuerte incidencia del virus del Bronceado del Tomate (TSWV). las actuaciones programadas se basaron en el control de su vector Frankliniella occidentalis mediante sueltas del depredador Orius spp apoyado en el empleo de trampas para el control de orugas de lepidópteros. En el año 2002 se inician las primeras experiencias, hasta llegar en el año 2005 las 850 ha de implantación con la suelta de 2,5 millones de Orius.
En el año 2006 estas experiencias se amplían a otros cultivos del Valle del Guadalentín como es la alcachofa y el brócoli, introduciéndose otros auxiliares y aumentándose las sueltas de Orius hasta alcanzar los cinco millones de individuos.
En 2004 se inician en los cultivos de naranjo y mandarino actuaciones para el control de la principal plaga de estas especies Ceratitis capitata (mosca de la fruta) por medio del control biotecnológico. Para ello se distribuyeron de forma gratuita trampas con feromonas para la captura masiva de este díptero.
En ese año la superficie controlada fue de 1.100 ha distribuidas en los términos municipales de Librilla y Alhama, extendiéndose en 2004 y 2005 a 3500 ha de municipios colindantes. También se están realizando sobre esta plaga experiencias basadas en técnicas novedosas como es la quimioesterilización de los adultos (machos y hembras).
Dichas actuaciones se han extendido en el año 2006 a otros cultivos como el melocotonero, nectarino, ciruelo y parral (1.650 ha) donde esta plaga ocasiona graves daños. Se han distribuido gratuitamente unos 150.000 cebos atrayentes en cítricos y 100.000 en uva de mesa.
Respecto al cultivo del limonero, de gran importancia para el agro murciano, la Consejería de Agricultura planificó experiencias para controlar su principal problema fitosanitario, el cóccido Aspidiotus hereae (piojo blanco). En 2006 se han realizado las primeras experiencias de su control biológico mediante el parásito autóctono Aphitis melinus.
La principal plaga que afecta a los frutales de hueso en Murcia es la mosca del Mediterráneo (Ceratitis capitata), la cual hasta la fecha se controlaba mediante la realización de aplicaciones fitosanitarias en las proximidades a las fechas de recolección.
En el año 2005 se inician experiencias con trampas atrayentes que esterilizan los individuos que entran en contacto con ella. Esta capacidad esterilizadora es transmitida a otros individuos al entrar en contacto unos con otros. Con esta novedosa técnica se reduce la aplicación de productos fitosanitarios. En el año 2006 ha sido implantada en unas 600 ha.
En otros cultivos, como la pera, se tiene previsto el realizar actuaciones para el control biológico y biotecnológico de Psila.
La actuación biotecnológica de mayor implantación en los cultivos de la región ha sido el empleo de técnicas de confusión sexual en las zonas productoras de parral, alcanzándose el 70% de la superficie cultivada.
Dada la importancia que tiene este cultivo en la exportación de los productos agrarios murcianos y conocida su problemática fitosanitaria, se tiene previsto realizar para el año 2007 un Plan Especial en este cultivo, basado en la suelta de insectos útiles y en la lucha mediante confusión sexual de las principales plagas que le afectan.
Una vez consolidada esta técnica en 2000 la Consejería de Agricultura decidió iniciar las experiencias en la Comarca del Altiplano en los cultivos de viñedo de vinificación, para el control de la polilla del racimo (Lobesia botrana). Dichas experiencias han mostrado resultados positivos, alcanzándose 2.300 ha en el año 2.006.
Los datos globales muestran en 2006 más de 15.000 ha sometidas a programas de control biológico y biotecnológico, fundamentalmente en cultivos de primor, donde se han soltado unos 130 millones de insectos útiles con un coste de EUR 2,2 millones. Esta suma es financiada por el Ministerio de Agricultura y por la Consejería de Agricultura y Agua.
La Administración Regional tiene previsto ampliar la superficie afectada por estas actuaciones e introducir otras nueva. Para ello la Consejería de Agricultura y Agua, dentro del programa AGRICULTURA LIMPIA, ha presupuestado dentro del Programa Operativo (2007-2013) la financiación de unos EUR 40 millones.
Inversión prevista
Año |
Mln-EUR |
2007 |
2,9 |
2008 |
4,0 |
2009 |
4,9 |
2010 |
5,9 |
2011 |
6,8 |
2012 |
7,5 |
2013 |
8,0 |
Aportes: 50% MAPA (Ministerio de Agricultura) + 50% CARM (Consejería de Agricultura-Murcia)
También se verifican mediante parámetros objetivos los resultados y beneficios para el consumidor, estableciéndose el Plan Especial de Vigilancia de la Fitosanidad del Pimiento en Invernadero, tomándose muestras en invernaderos y en los almacenes de confección para comprobar el nivel de residuos de productos fitosanitarios.
En la programación de estas muestras se tuvieron en cuenta varios parámetros como: la distribución de la producción, la representatividad de las muestras seleccionadas en el global de la producción comercializada, tamaños de explotación y grado de tecnificación, al objeto que los resultados obtenidos sean representativos de la situación del sector.
Igualmente se ha controlado la existencia de sistemas de trazabilidad tanto por parte de los agricultores y por los envasadores que ponen la producción en mercado, todos los controles y muestreos realizados se han efectuado según las normas oficiales realizados en otros programas de vigilancia.
Por ultimo cabe destacar los resultados obtenidos, si de las 95 muestras tomadas (28 en invernaderos y 67 en almacenes), en ningún caso se han superado los LMR (límites máximos de residuos) establecido por la legislación vigente, mientras que en 80 de ellas no se detectó plaguicida alguno (a pesar de haberse analizado más de 110 plaguicidas, así como ditiocarbamatos). En el resto de las muestras 15 se detectó como máximo un plaguicida por muestra y con niveles muy inferiores a los máximos legalmente fijados (entre el 5 al 10% del LMR). Los datos porcentuales se expresan en la siguiente tabla:
Fitosanidad del pimiento en invernadero
Condición |
% |
Sin residuos |
84 |
Residuos < LMR |
16 |
Superan LMR |
0 |
Igualmente es de destacar que los sistemas de trazabilidad se encuentran fuertemente implantados, lo que asegura el poder establecer responsabilidades en caso de producirse desviaciones de la normalidad.
Estos resultados obtenidos son claramente esperanzadores y animan a la Consejería a seguir trabajando en estos temas en aras de lograr una agricultura diferenciadora que asegure la calidad de las cosechas murcianas. •